Por: Anabel de Anda Zenteno

Febrero es un mes de muchos discursos sobre el amor, corazones por todos lados, ventas de todo tipo y manifestaciones de amor a cada paso, sin embargo, cuando se hacen presentes esos sentimientos que nos hace sentir vivos y felices, podemos considerarnos más que afortunados pues habremos encontrado eso que llamamos, “conexiones auténticas”, esas que nos hacen crecer, conectarnos, evolucionar y que nos llevan hasta las nubes. Sin embargo, en ocasiones son tan difíciles de encontrar, que hasta podemos llegar a dudar ya de su existencia en un mundo tan conectado-desconectado.

Pero, desde el punto de vista de la Astrología les comento lo siguiente, este es un febrero diferente, venimos de procesos donde la atmósfera es de cambio, pues pasamos un mes de enero con eclipses que nos hizo sentir eterno el mes, valorar los lazos que hemos construido a lo largo de nuestra vida, de ser proactivos y constructivos en todas nuestras relaciones, para conectar y así poder transformarlas, un mes de febrero para ser honestos con nosotros mismos, nuestros sentimientos y búsqueda de nuestros más honestos ideales.

Desde la mirada Astrológica, el amor esta fuertemente representado por Venus, Marte, la Luna y el Sol, en la Carta Astral de la persona, cada uno de estos planetas y luminarias con sus características muy particulares forman una cosmovisión única que necesita ser atendida y correspondida.

El sol es nuestra esencia, conciencia, el YO, nuestra identidad y voluntad, es nuestra identidad básica, los propósitos en la vida. Tiene una función vital sobre los demás planetas. El signo donde esta el sol, evidentemente nos da el signo del zodiaco.

La Luna representa las emociones, los sentimientos las reacciones afectivas, tiene una relevante importancia durante los primeros años de vida, el lugar donde se encuentra en la carta astral nos indica nuestras reacciones instintivas a los estímulos externos, así como la forma de expresar los sentimientos.

Venus simboliza la búsqueda de la armonía a través de las relaciones, el amor o las expresiones artísticas, en la Carta Astral representa las cosas que nos gustan, los deseos, lo que nos atrae, nuestra necesidad de relacionarnos personal y socialmente, así como nuestra capacidad de atraer a los demás.

Marte representa nuestra capacidad de decisión, iniciativa, energía, nuestro afán de conquista, los actos instintivos, es donde se encuentra nuestra sexualidad activa, el impulso masculino. Aquí vemos como conquistamos lo que queremos o luchamos por las cosas, como nos autoafirmamos.

Como pueden ver estos elementos son muy importantes como herramienta de autoconocimiento que puede mostrarnos y entender aspectos tal vez desconocidos de nosotros mismos y de los demás, aportándonos la capacidad de entendimiento que nos lleve a identificar aquello que corresponde a nuestra esencia y naturaleza, así como entender al otro.

En definitiva, comprendiendo estos conceptos inherentes en cada uno de nosotros, podemos concluir lo que está muy presente en nuestra naturaleza y ADN…. nuestra búsqueda y necesidad de Amor, de conexiones auténticas, de sentirnos amados y correspondidos, de poder compartir y nuestra capacidad de entrega, esa es la maravilla del amor, pues además podemos impregnarlo en todas nuestras áreas de vida, porque, ¡nada en este mundo pueden entenderse sin la magia del AMOR!

¡Feliz 14 de Febrero!

 

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