Si estás planeando tu boda y aún no decides dónde hacerla, yo te recomiendo una boda en playa. ¿Por qué una boda en playa? Por éstas 5 sencillas razones que te facilitarán la vida:
1.- Una boda destino siempre es más memorable, No sólo para los novios, tu evento se transforma a “la boda”, en lugar de “el día de la boda”. Es decir, la celebración se prolonga, desde llegar un par de días antes al hotel, recibir a los invitados, poder disfrutar con ellos momentos y actividades previas a “el gran día”.
2.- Tienes a todos reunidos en un solo lugar, cada día es más común que por trabajo la pareja ya no viva en la misma ciudad que sus padres. Y aquí surge la disyuntiva de ¿dónde hacemos la boda? La ciudad de la familia de ella, la ciudad de la familia de él o dónde ahora radica la pareja… Entonces entran los cuestionamientos y el ¿cómo decirles?, para que nadie termine sentido. Así, reúnes a todos los invitados en un lugar diferente. Sin distinción, TODOS tendrán que moverse de su ciudad para ser partícipes y disfrutar del evento.
3.- Pretexto para unas mini vacaciones, las bodas son eventos que, al planearse con tiempo suficiente, dan la oportunidad a los invitados para organizar unos días libres del trabajo y tomarse un descanso. Al transformarse en unas vacaciones, te aseguro, todos estarán muy entusiasmados con tu boda.
4.- Actividades para todos los gustos, independientemente del destino que elijas puedes dar opción a tus invitados para que ya sea que, hagan un tour a un sitio arqueológico, un día de pesca, practiquen snorquel, vayan a un parque eco turístico. Esto es muy recomendable porque si tienes cosas pendientes para la ceremonia o simplemente te quieres relajar, tendrás la seguridad de que todos estarán más que felices y pasándola de lujo. No tienes que estar tú personalmente encargad@ de recibir y ver por las necesidades de los invitados. Puedes apoyarte con el hotel para organizar actividades diarias con tu grupo de invitados. De igual manera, si hay alergias o requerimientos especiales como es el caso de las personas mayores o los que viajan con niños, el hotel se encarga.
5.- Encontrarás opciones para todos los gustos y presupuestos, muchos piensan que el casarse en la playa será mucho más caro y ¡no! Gran sorpresa, depende la ciudad en la que vivas, pero al menos, en la CDMX es bastante costoso un banquete de boda con todo lo que conlleva. Algunos los hoteles en playa hasta manejan paquetes de “boda gratis”, siempre y cuando reserves un determinado número de habitaciones. En otros casos dan upgrade de habitación a los novios, o bien, un fin de semana para su aniversario de bodas… Además de que el equipo de wedding planners de los hoteles se las saben de todas, todas. Te ayudan en cada momento y hacen que te olvides del estrés.
Mi recomendación es, si te vas a casar, una boda en playa puede ser la opción ideal.
Disfruta cada momento, no seas la típica bridezilla. Recuerda que sólo te casas una vez (o 3, como es el caso de algunas amigas), pero ¡en fin! A lo que voy es que es un evento especial, vívelo y gózalo.
Déjate guiar por los expertos, ellos saben lo de lo que hablan, escucha sus sugerencias.
Y, por último, ese día es de ustedes, ¡si!, tuyo y de tu pareja. Olvídate de que si tu mamá quería flores moradas o si tu suegra prefería banda en vivo en lugar de dj. La pareja decide.