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En un mundo donde la estética y el bienestar personal juegan un papel cada vez más importante, la cirugía estética ha evolucionado notablemente en los últimos años. Desde innovaciones en técnicas quirúrgicas hasta avances tecnológicos revolucionarios, la industria está experimentando un cambio significativo en la forma en que aborda las necesidades estéticas de las personas. El cirujano plástico mexicano David de Rungs, conversa sobre las principales tendencias en procedimientos para mujeres de más de 30 años.
El Dr. de Rungs compartió algunas perspectivas valiosas sobre las tendencias emergentes que anticipan el campo de la cirugía en el año 2025, destacando dos procedimientos en particular que están ganando popularidad entre las mujeres de más de 30 años: la cirugía de cara y la rinoplastia preservadora, ambas diseñadas para lograr resultados naturales y armoniosos en el rostro de los pacientes.
La Sociedad Brasileña de Cirugía Plástica (SBCP), reveló en un estudio que los procedimientos más populares entre las mujeres latinoamericanas de 30 a 59 años son:
Aumento de busto (53.1% del total)
Rinoplastia (63.7% del total)
Inyecciones de toxina botulínica (47.2% del total)
La cirugía de cara, también conocida como ritidectomía, busca corregir los signos visibles del envejecimiento, como las líneas finas, las arrugas y la flacidez de la piel. Sin embargo, esta técnica ha evolucionado hacia un enfoque más conservador, conocido como lifting facial preservador. Este procedimiento se basa en la redistribución de los tejidos faciales sin necesidad de extirpar grandes cantidades de piel, preservando así la estructura natural del rostro y evitando la apariencia artificial.
Por otro lado, la rinoplastia preservadora se enfoca en realizar modificaciones sutiles en la nariz, respetando su forma natural y evitando cambios radicales. Esta técnica es ideal para pacientes que buscan mejorar la armonía facial sin perder la esencia de su nariz.
Las inyecciones de toxina botulínica, también conocidas como Botox, complementan estas técnicas al suavizar las líneas de expresión y prevenir la formación de nuevas arrugas. Su aplicación precisa y controlada por un especialista experimentado garantiza resultados naturales y temporales.
Según el Dr. David de Rungs, “la cirugía de mínima invasión se ha convertido en la tendencia actual. Estos procedimientos ofrecen una recuperación más rápida, son ambulatorios y resultan en cicatrices menos visibles”. La cirugía de cara y la rinoplastia preservadora son ejemplos claros de esta tendencia, con pacientes que pueden recibir el alta en tan solo dos semanas.
El Doctor también enfatizó en el papel crucial que juega la tecnología en la mejora de los resultados y la reducción de los tiempos de recuperación. El uso de láser de fibra óptica, cirugía endoscópica y dispositivos como el pezótomo están revolucionando la forma en que se realizan estos procedimientos, minimizando la inflamación y mejorando la cicatrización.
La cirugía estética está experimentando una transformación significativa, impulsada por avances tecnológicos y cambios en las preferencias de los pacientes. Con procedimientos de mínima invasión, tiempos de recuperación más rápidos y resultados cada vez más naturales, la cirugía estética continúa siendo una opción atractiva para aquellas mujeres que buscan mejorar su apariencia y su confianza en sí mismas.
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